Delirios sobre el amor,el enamoramiento, la sexualidad, las relaciones interpersonales, los celos, el equilibrio, las emociones, el deseo, el humor, la imaginación y la conducta humana.
miércoles, 27 de mayo de 2009
Súbete a mi carrito de la compra
¿Tendría que sudar verdad para que me creyeras?, tengo que poner mi cuello en las manos del que juzga sin saber bien que está juzgando para susurrar que me devuelvan mi dignidad. Se lo que quiero en este momento, quiero reptar hasta la tu conciencia a través de tu inconsciente, asentarme allí con los ojos bien abiertos hasta que vea pasar el autobús de tu razonamiento esquivo. Sé que tienes dudas de quienes somos cuando nos besamos, de quién te abraza cuando paso mis manos por tu espalda, de quién te habla con media boca cerrada para no herir demasiado con palabras banales que enseñan una verdad incierta, si no lo digo más alto es porque no quiero despertar a los pájaros del parque y porque no tengo necesidad de gritarlo sino de demostrártelo, sino lo pronuncio es porque un miedo distinto a quererte se asoma cauteloso por mi boca, expulsado por mi laringe, un miedo a causar miedos a otros que no somos mostros dos. Pero ese miedo se ha disipado ya, ya no tengo miedo a reconocer quiénes somos y a quienes asustamos con nuestras palabras. Me atrevo, me desplazo, solo queda que subas al mismo carrito de la compra que yo y nos compremos esa botella de agua vital que hace florecer con energía lo que llevamos dentro.
La verdad me gusto mucho este cotidiano un poco mas sublime que ir al supermercado.
ResponderEliminarSaludos ausentes.
Yo me subiría al carrito, aún con miedo.
ResponderEliminarQue se suba, se va mejor en carro y acompañada que a pie y sola.
ResponderEliminarBesos