miércoles, 12 de marzo de 2014

¿Qué es hacer Luz de Gas? Maltrato psicológico, manipulación y chantaje emocional en las relaciones de pareja.

Muchas relaciones de pareja se vuelven tóxicas cuando uno de los miembros o ambos comienzan a mantener interacciones contaminadas de manipulación, chantaje emocional y en definitiva maltrato psicológico.

El maltrato psicológico es un comportamiento que provoca en la victima inestabilidad emocional, pues la persona maltratadora continuamente infravalora la opinión de su pareja, la culpabiliza, la intimida y la desacredita, utilizando como medio el afecto que la victima siente sobre el agresor.

Y un tipo de maltrato psicológico que puede ocurrir en las relaciones de pareja es el llamado “luz de gas”.  Para  la psicóloga por la Universidad de Nueva York Rojas-Marcos: “Cuando alguien nos manipula y nos produce una enorme inseguridad sobre nosotros mismos y nuestra realidad, se denomina hacer luz de gas[1]”. Así pues cuando nuestra pareja quiere hacernos dudar de nosotros mismos, nos confunde, sentimos que perdemos la cabeza, dejamos de confiar en nuestro propio criterio, está utilizando contra nosotros este tipo de maltrato psicológico.

Cartel de la película Gaslight.
Se adoptó este nombre de “hacer luz de gas” por un film llamado “Gaslight (1940)”, del director George Cukor, (la película se conoce en español como “Luz que agoniza”[2]), donde el protagonista masculino lleva casi a enloquecer a su pareja, pues intenta convencerla de cosas que no son reales.

La persona victima de este maltrato llega a pensar que se está volviendo loca, pues su realidad no coincide y es opuesta a la realidad que le cuenta su pareja, con la finalidad de convencerla y manipularla en su favor. La victima puede llegar a tener sentimientos y pensamientos como los siguientes:

·         Percepción de que está perdiendo el sentido de la realidad, ya no sabe lo que vio o no vio, provocándole confusión y desconcierto.

·          Inseguridad.

·         Daños en su autoestima, por la desacreditación continua y los sentimientos de culpabilidad, pues su pareja echa las culpas de cualquier fallo (sea real o no)  a la víctima.

·         Aislamiento progresivo de amistades y familia.

·         Altos niveles de ansiedad y estrés.

·         Dependencia extrema hacia su pareja-agresor.

Y el agresor suele actuar de una determinada manera a la hora de hacer luz de gas, algunas de sus conductas pueden ser:
·         El agresor enamora a la víctima, con lo que establece una relación especial.
·          La vida social de la victima empieza a reducirse, pues el agresor la limita, con diversos chantajes (celos, racionalización de argumentos, utilizando frases como: “debemos estar juntos”, etc.).
·         Manipula la realidad con el objetivo de conseguir dominar a la pareja, controlar y anular su voluntad.  Esgrime frases como: “Con lo inteligente que eres, no entiendo como no compartes mi punto de vista”, con lo que provoca confusión pues por un lado llama inteligente a la víctima y por otro la embauca para que acabe opinando como considera el agresor.
·         Poco a poco va introduciendo la duda sobre los actos, creencias y sentimientos de la víctima, para desconcertarla y que al final sea el agresor el que decida ante cualquier toma de decisión.
·         Aprovecha los estados de nerviosismo y agresividad que pueda tener la víctima para afianzar sus razonamientos, aduciendo que no está siendo cabal y que es muy impulsiva, cuando este estado de nervios lo ha provocado la persona agresora, pues induce a la victima estrés y frustración, por lo que es normal que antes o después salte o se enfurezca.

En definitiva una persona que hace luz de gas lo que intenta es controlar y anular la voluntad de su pareja, dominándola para que pierda el control de su realidad y no pueda tomar decisiones, ya que el agresor es quien desea tomarlas por ambos.

Una relación basada en el chantaje, la manipulación y el maltrato psicológico es una relación intensamente tóxica, de la cual la mejor opción en todos los casos es buscar alternativas o si se está sufriendo, ponerle fin cuanto antes. Una relación de pareja se ha de basar en la tolerancia y el respeto mutuo, con la manipulación ambos valores se pudren, consumiendo así a la propia relación.



[1] Datos hallados en: Rojas-Marcos, L. (2010). El sentimiento de culpa. Santillana Ediciones Generales: Madrid.
[2] Datos hallados en: http://www.filmaffinity.com/es/film270165.html. La sinopsis de la misma página dice: En la Inglaterra victoriana, una bella mujer (Ingrid Bergman) se casa con un famoso pianista (Charles Boyer). La felicidad desaparece cuando en la casa, donde años atrás se cometió un asesinato, la mujer empieza a oír extraños e inexplicables ruidos; mientras tanto, su marido la atormenta hasta hacerla creer que se está volviendo loca

8 comentarios:

Anónimo dijo...

Buen artículo. Una correción: L. Rojas-Marcos es hombre, no mujer.

Jalo dijo...

Gracias por leerme. En este caso se trata de Laura Rojas-Marcos, psicóloga. Tengo su libro de donde he sacado la información. Habrá más de un/una Rojas-Marcos.

Anónimo dijo...

Ah vaya, creía que era una referencia a Luis Rojas- Marcos. Qué metida de pata jaja http://es.wikipedia.org/wiki/Luis_Rojas-Marcos

Unknown dijo...

En mi caso, además de constantemente darme a entender que soy muy frágil, muy emocional y desequilibrada, hacía cosas para confundirme. Compró un desodorante de mujer y lo puso al lado del suyo. Quiso poner una foto de su ex en mi muro de Facebook y luego lo negó y dijo que yo me lo imaginaba...Le decía a su familia y amigos a mis espaldas que yo no era equilibrada...
Por suerte soy terapeuta y eso me ha dado herramientas para ver qué estaba siendo víctima de gaslighting y alejarme de él. Un hombre seductor y líder carismático que con su encanto hacía creer a todo el mundo que yo sólo era una pobre enferma y que seguía conmigo por pena.

Anónimo dijo...

Buenas noches.Mi caso sucedió cuando compartí mi piso.Una individua me tenía acobardada
y me trataba así hasta que me dí cuenta que me hacía luz de gas.Fué un dia caluroso de
Junio en el que me dijo que me habia olvidado los radiadores encendidos.Yo jamás he en-
cendido la calefacción en verano.
Me quedé impresionada y a los pocos dias le dije que tenía que irse.Tuve hasta que cambiar
las llaves para echarla.Fué algo horrible que aún no me quito de la cabeza.
Sigo sin saber que pretendía.Mi casa es estupenda y ella vivía muy bien por muy poco dinero.
Le tengo hasta miedo.Ahora cuelga fotos de ella en las redes vestida igual que yo.

Joan Marín dijo...

Esta definición es tan clara que poco se puede añadir, y como señala cierta persona
esto no esta limitado únicamente a la pareja, pues me han aconsejado que el especialista
redacte lo mas importante de lo sucedido en mi caso y los sitios físico y virtuales que se
cebaron cuando vieron que ya tenias cierto ...originado por la pareja y que ahora intenta
otros repetir.
Gracias.

Anónimo dijo...

Muchas gracias por este articulo. Yo he vivido esto, y aun ahora sigo dudando de si todo es fruto de mi imaginacion, si, como dice el, soy una exagerada y emocionalmente inestablie con graves problemas sicologicos. Se que no es cierto, pero la duda, despues de cinco años, sigue ahi.

Un saludo,
E.

Susana Román dijo...

Muchas gracias por el artículo pero permíteme corregirte en un dato. Originalmente "Luz de gas" es una obra de teatro británica de Patrick Hamilton, que se estrenó en 1938. En EEUU se le conoció con Angel Street. Más tarde 1940 y 1944 aparecieron las adaptaciones cinematográficas.
Un saludo.

DELIRIOS Y LOCURA

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Delirios y otros problemas

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